martes, 13 de mayo de 2025

Sí, Soy Parcial… Y ESTÁ BIEN. Mi Lealtad no con los Políticos.

A ver, que quede claro desde el inicio: SÍ, este espacio es PARCIAL. Y lo digo sin pelos en la lengua. Totalmente parcial. Pero ojo, quizás no como te lo imaginas. Esto no va de ser pro-Morena, anti-PAN o palero del PRI.

Con contadas excepciones, no defiendo una preferencia política per se. Ante todo, soy un celoso guardián del Estado de Derecho y la democracia liberal. Mi interés primordial es el CUMPLIMIENTO de la ley frente a su VIOLACIÓN. Y sí, a veces me clavo en temas que me mueven especialmente.

Es normal que haya diversidad de opiniones, ¡faltaría más! En política, cada cabeza es un mundo. Tengo convicciones personales, morales o de fe muy firmes, pero creo que esta red ni ninguna otra es el lugar para ventilar esos temas.

Pero aquí la CLAVE: NO tomo partido por colores o siglas. Tomo partido con base en principios LEGALES y en la REALIDAD. Y sí, eso a veces significa que un partido (y sus fans) quedan PEOR parados que otros. No es por grilla, es porque, en mi opinión, algunos se creen por encima de la LEY.

Así que sí, lo admito: soy parcial. Mi visión es: Soy APARTIDISTA, pero NO apolítico. La ley es el resultado de la política; es imposible hablar de una sin tocar la otra.

Por eso, CREO (así, con mayusculas) que hoy más que nunca hay que jugársela. ¿Qué está en juego? TODO. En mi opinión, el Estado de Derecho MISMO.

En el CENTRO de mis opiniones políticas está el ESTADO DE DERECHO. ¿Qué significa? Que la ley aplica PAREJO. Seas Juan Pérez o el Presidente de la República. A la ley no le debería importar tu filiación partidista.

Cuando alguien viola la ley o la retuerce hasta hacerla irreconocible, LO DIGO. Si un político o funcionario abusa de su poder, se salta las trancas o ignora la ley, ¡claro que lo voy a comentar! Y si eso le cala a tu corazoncito partidista… pues sorry, not sorry. Ese es TU problema.

CREO en el ACCESO A LA JUSTICIA y en la INDEPENDENCIA JUDICIAL. Que la ley no sea solo para los ricos y poderosos. Si el sistema está cargado contra el ciudadano de a pie o si los tribunales se vuelven herramientas políticas, ¡ALERTA! Eso es un problemón. Los jueces deben ser árbitros NEUTRALES, no operadores políticos a modo para impulsar agendas. Y si un juez se pone la camiseta de fanático, también se dice y se comenta (Hola Arturo Zaldívar).

CREO en la participación política INFORMADA y ÉTICA. Implica exhibir la desinformación, desmontar mentiras y sí, criticar con dureza las posturas malintencionadas.

CREO firmemente en los DERECHOS HUMANOS e individuales. Presunción de inocencia, libertad de expresión… ¡fundamentales! Y sobre la libertad de expresión, decir que en escencia te protege de la CENSURA gubernamental, NO de las consecuencias, críticas o del ridículo por decir tonterías. El gobierno NO tiene vela en el entierro de regular o castigar lo que piensas o dices. La libertad de expresión y el derecho de réplica NO son facultad del gobierno, ¡ni mucho menos un derecho SUYO!

Y claro, lo que DEFIENDO también define a lo que me OPONGO: Me OPONGO frontalmente a la CORRUPCIÓN política y al ABUSO DE PODER. Suena obvio, ¿no? Pues la corrupción apesta. Que los políticos usen su cargo para enriquecerse, violen la ley impunemente o usen las instituciones como garrote personal… ¡ES UN PROBLEMA GRAVE! Sea QUIEN SEA, lo voy a señalar. REPRUEBO que se use el poder del Estado como ARMA POLÍTICA. Ya sea con linchamientos mañaneros, procesos judiciales con jiribilla política o chicanadas legales para obstruir la justicia. Cuando el Estado quiere jueces a modo en vez de un contrapeso a sus excesos, es ABUSO DE PODER. Y lo denunciaré SIEMPRE.

Me OPONGO a la MENTIRA, la IGNORANCIA, la ESTUPIDEZ y la DESVERGÜENZA. A ver, un buen debate es bienvenido. Lo que NO tolero son las mentiras, la ignorancia rampante y la estupidez. Hay un ABISMO entre argumentar de buena fe y soltar sandeces. Me gusta el debate con sustancia. Si vas a entrarle, que sea con argumentos. Y sí, creo que nos urge recuperar la VERGÜENZA y el respeto propio. Lamentablemente, defender el Estado de Derecho hoy es ir contracorriente. Para muchos, todo se vale con tal de salirse con la suya, ya sea desde el poder o aplaudiéndole.

Todo esto que defiendo debería ser APARTIDISTA. Si a tu partido le molesta esto… pues tu partido APESTA. Así de simple. Y el típico "es que los otros también lo hacían" es tan CIERTO como IRRELEVANTE para justificar el cochinero actual.

Hoy, estos ideales no los comparten todos por igual. Así que, al grano: el ELEFANTE EN LA HABITACIÓN. Muchos acusan de "parcial" o "traidor a la patria" a quien critica a López Obrador y Morena. Déjenme ser CRISTALINO: No me cae mal AMLO por ser AMLO. Me OPONGO a López Obrador porque está DESMANTELANDO ACTIVAMENTE el Estado de Derecho. Y en la medida en que Morena como movimiento va en contra de estos ideales, pues también estoy en contra de ese movimiento.

A raíz de esto, hay opinólogos que antes negaban las tendencias autoritarias y antidemocráticas de Morena, y ahora preguntan con falsa inocencia: "¿Quién lo hubiera imaginado? ¡No se podía saber!" ¡Pues MUCHOS lo dijimos! SÍ SE PODÍA SABER. Lo vimos venir. Lo vimos en su etapa de oposición, en su gobierno en CDMX, en su desacato a amparos, en su recurrente desconocimiento de derrotas electorales, en su "al diablo las instituciones", en su ejercicio del poder presidencial. Antes de ser presidente y DURANTE los seis años. Las señales eran CLARÍSIMAS.

Quienes lo advertimos fuimos Casandras, con el don de profesía pero condenados a que no se nos creyera. Pero si entiendes un MÍNIMO de leyes, no es difícil ver cuándo se las están pasando por el arco del triunfo. Desafortunadamente, hoy muchos se hacen de la vista gorda con la ley por conveniencia política. Pero las señales estaban ahí, a la vista de todos. ¿Recordamos cuando AMLO ignoró un amparo en el caso El Encino? Que no lo castigaran no significa que no haya delinquido. Es un antidemócrata que desconoció resultados electorales e intentó impedir la toma de posesión de Calderón. #Memoria Además, INJURIÓ desde el poder presidencial a críticos, reveló datos personales de periodistas como Loret, de Xóchitl, de corresponsales extranjeros. #AbusoDePoder Organizó un fideicomiso opaco para los damnificados del sismo de 2017, usándolo para su promoción y la de su partido rumbo a 2018. CONFISCÓ ilegalmente fideicomisos de entes autónomos para usar los recursos discrecionalmente y en opacidad.

Podemos debatir si son delitos, pero sin duda son o DEBERÍAN SER políticamente descalificantes. Y ahora, Sheinbaum, como su sucesora, busca dinamitar el orden constitucional para, entre otras cosas: destruir al Poder Judicial, censurar críticos, confiscar recursos del INFONAVIT, proteger a Cuauhtémoc Blanco, injuriar a quienes la cuestionan.

Y que quede CLARO: si en 2030 llega un presidente del PRI, PAN o MC y hace la MITAD de lo que han hecho AMLO, Sheinbaum y Morena, lo criticaré con la MISMA DUREZA. #Coherencia

Esto NO es de partidos. La pregunta es: ¿LA LEY TODAVÍA SIGNIFICA ALGO? Esto no es solo "mala política", es el germen de un régimen autoritario, de una República Bananera. Cualquier otro presidente que hiciera esto sería comparado con Echeverría o López Portillo. Y cuando un panista, priista o "naranja" comete una ilegalidad, TAMBIÉN LO DIGO.

NO critico a AMLO, Sheinbaum y Morena por "odio". Los critico porque están intentando ACTIVAMENTE desmantelar la democracia, corromper el sistema legal y ponerse POR ENCIMA DE LA LEY.

Esto es un problema, tengas el partido que tengas. Y mira, si crees que esto es "ser parcial", te propongo un trato: el día que un OPOSITOR intente desconocer una elección, ocultar información pública o presionar jueces para arrestar enemigos políticos, ¡seré el PRIMERO en criticarlo!

Porque esto NO es partidismo, es la DEFENSA del Estado de Derecho.

Ojalá la discusión política no girara tanto en torno al obradorismo, ni tuviéramos que analizar constantemente medidas legales inéditas y autoritarias. Pero, lamentablemente, estamos bajo ASECHO constante.

Ser objetivo NO es darle el mismo espacio a "ambos lados" como si fuera un partido de fútbol. NO ES POSIBLE criticar a un opositor por cada ilegalidad de Morena, ¡simplemente porque no hay tantos opositores cometiéndolas! Las violaciones a la ley NO están distribuidas equitativamente.

Si esto te molesta, quizás es hora de que TÚ empieces a exigir más a TUS políticos. Quizás TÚ también deberías ser PARCIAL… por el Estado de Derecho.

miércoles, 7 de mayo de 2025

Matar a los Abogados: La Reforma Judicial Mexicana y el Eco de Shakespeare

En Enrique VI, Parte 2, William Shakespeare pone en boca de un rebelde una frase que resuena con inquietante claridad en el México de 2025: “Lo primero que haremos, matemos a todos los abogados”. Pronunciada por Dick, el carnicero, en el contexto de una revuelta anárquica liderada por Jack Cade, la línea no es un llamado literal al asesinato, sino una sátira mordaz contra quienes ven en las leyes y sus defensores un obstáculo para imponer su visión de “justicia”. Los rebeldes de Shakespeare justifican su ataque al orden legal como un medio para liberar al pueblo de una élite opresora, pero su verdadera intención es el poder sin restricciones. Hoy, la reforma constitucional al Poder Judicial en México, impulsada por Andrés Manuel López Obrador y consolidada por Claudia Sheinbaum, evoca este espíritu con una precisión alarmante. Bajo el pretexto de democratizar la justicia, la reforma somete al Poder Judicial, desmantelando su independencia y amenazando los cimientos de la democracia mexicana.

La reforma, aprobada en 2024 y en marcha en 2025, transforma radicalmente el Poder Judicial. La elección por voto popular de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la reducción de ministros de 11 a 9, la creación de un Tribunal de Disciplina Judicial y un Órgano de Administración externos, y la limitación de la capacidad de la SCJN para suspender leyes generales en ciertos casos son cambios que, según sus defensores, combaten la corrupción, el nepotismo y el elitismo de un sistema judicial desconectado del pueblo. Claudia Sheinbaum, en su narrativa, ha insistido en que la reforma responde a la “voluntad popular”, citando datos como el 46% de nepotismo en el Poder Judicial para justificar la necesidad de una justicia más democrática. Esta retórica, que presenta a los jueces como una casta privilegiada, recuerda a los rebeldes de Shakespeare, quienes vilipendian a los abogados para legitimar su cruzada.

Sin embargo, al igual que en la obra de Shakespeare, las supuestas buenas intenciones de la reforma ocultan un objetivo más profundo: la sumisión del Poder Judicial a los otros poderes del Estado. La elección popular de jueces, aunque vendida como democratización, expone a los magistrados a presiones políticas, mediáticas y hasta del crimen organizado, como ha ocurrido en experiencias similares en Bolivia. La creación de órganos externos de control, que operan al margen de la SCJN, introduce una vigilancia que amenaza la autonomía judicial. Más preocupante aún es la propuesta de “Supremacía Constitucional” de Morena, que limitaría la capacidad de la Corte para revisar reformas constitucionales, debilitando su rol como contrapeso. En la práctica, estas medidas no solo “matan” la independencia de los jueces, sino que allanan el camino para un Ejecutivo y un Legislativo —dominados por Morena— sin frenos institucionales.

La comparación con Shakespeare no es casual. En la obra, los rebeldes no admiten que su meta es el caos o el poder absoluto; en cambio, disfrazan su ataque al sistema legal como una lucha por el bien común. De manera similar, el gobierno mexicano no verbaliza un deseo de controlar la SCJN, sino que envuelve la reforma en un discurso de justicia social y soberanía popular. AMLO y Sheinbaum han insistido en que el pueblo, no las élites, debe decidir el rumbo de la justicia. Pero este argumento ignora una verdad fundamental: en una democracia, la independencia judicial no es un privilegio, sino una garantía contra el autoritarismo. Sin una SCJN autónoma, capaz de cuestionar leyes o actos de gobierno, el riesgo de abusos de poder crece exponencialmente.

Los defensores de la reforma podrían argumentar que el Poder Judicial mexicano, con sus fallos cuestionables y casos de corrupción, necesitaba una transformación. Nadie niega que el sistema tenía problemas: desde sentencias percibidas como favorables a intereses económicos hasta prácticas de nepotismo documentadas. Pero la solución no puede ser desmantelar la independencia de la institución que, a pesar de sus fallas, ha servido como último recurso para proteger derechos fundamentales y limitar excesos del poder. La SCJN, por ejemplo, ha emitido fallos históricos en defensa de minorías, derechos humanos y el equilibrio de poderes, roles que ahora están en peligro.

El eco de Shakespeare nos advierte de las consecuencias de “matar a los abogados”. En la obra, la rebelión de Cade lleva al caos, no a la justicia. En México, la sumisión del Poder Judicial podría derivar en una democracia debilitada, donde la “voluntad popular” —interpretada por el partido en el poder— prevalezca sobre el Estado de Derecho. La reforma, aprobada con la legitimidad formal de mayorías calificadas, no puede ignorar las protestas de jueces, académicos y organismos internacionales, ni los cientos de amparos presentados contra ella. Estas voces no son mera resistencia al cambio, sino un llamado a preservar los contrapesos que sostienen la democracia.

Es hora de escuchar la advertencia de Shakespeare. La reforma judicial, envuelta en buenas intenciones, amenaza con repetir el error de los rebeldes de Enrique VI: destruir las instituciones legales en nombre del pueblo, solo para consolidar el poder de unos pocos. México merece una justicia reformada, sí, pero no a costa de su independencia. El gobierno debe reconsiderar su rumbo, abrir un diálogo genuino y ajustar la reforma para fortalecer, no someter, al Poder Judicial. De lo contrario, el epitafio de la SCJN podría ser el mismo que el de los abogados de Shakespeare: sacrificados en nombre de una “voluntad popular” que, al final, solo beneficia a quienes la invocan.

martes, 6 de mayo de 2025

El SAT y los Reembolsos de ISR 2024: ¿Táctica Dilatoria o Fallas Sistémicas?

 La situación de los rechazos masivos de devoluciones automáticas de saldos a favor de ISR por parte del SAT en 2024 refleja una problemática real que ha generado frustración entre los contribuyentes, especialmente entre personas físicas con ingresos por sueldos y salarios. A continuación, desgloso mi opinión sobre el tema, las posibles razones detrás de esta situación, y ofrezco recomendaciones prácticas para los contribuyentes, incluyendo aquellos sin eFirma, basándome en la información disponible y en un análisis crítico de la situación.

Opinión sobre la situación

  1. Posible táctica dilatoria del SAT: Los rechazos masivos por "inconsistencias" en deducciones personales, especialmente cuando estas coinciden con los datos precargados por el propio SAT, sugieren una estrategia para retrasar o desincentivar las devoluciones. Esto podría deberse a varias razones:
    • Presión administrativa o financiera: El SAT podría estar enfrentando limitaciones presupuestales o logísticas para procesar devoluciones automáticas en el plazo de 40 días hábiles establecido por el artículo 22 del Código Fiscal de la Federación (CFF). Rechazar devoluciones automáticas y requerir solicitudes manuales permite al SAT extender los plazos de revisión y pago, al exigir documentación adicional que ya debería estar en su poder (como CFDI de deducciones).
    • Falta de claridad en los criterios de revisión: Los motivos de rechazo, como "inconsistencias" en deducciones o la solicitud de papeles de trabajo para ingresos y retenciones, parecen genéricos y poco específicos. Esto refuerza la percepción de que el SAT está aplicando criterios opacos o arbitrarios, lo que genera desconfianza entre los contribuyentes.
    • Desincentivo a contribuyentes sin eFirma: Los contribuyentes que solo tienen ingresos por sueldos y salarios y han cumplido con contraseña (válido para saldos a favor menores a $150,000 si se usa una CLABE precargada) enfrentan un obstáculo adicional al requerir eFirma para la solicitud manual. Esto podría interpretarse como una forma de filtrar o desalentar solicitudes, ya que obtener la eFirma implica un trámite adicional que no todos los contribuyentes están dispuestos o capacitados para realizar.

 

  1. Problemas estructurales en el sistema automático: El Sistema Automático de Devoluciones, aunque diseñado para facilitar el proceso, parece estar generando resultados inconsistentes. Por ejemplo, se han reportado casos en los que contribuyentes con operaciones similares reciben tratamientos distintos (unos obtienen la devolución y otros no), lo que apunta a fallas en los algoritmos de validación o a una aplicación desigual de las reglas. Además, el SAT ha señalado que más del 30% de las devoluciones automáticas son rechazadas, a menudo por errores en la captura de datos o en la CLABE bancaria, pero también por cuestiones que no siempre son claras para el contribuyente.

 

  1. Percepción de mala fe: La solicitud de documentación que ya está en poder del SAT (como CFDI de deducciones o estados de cuenta) y la exigencia de papeles de trabajo para integrar los ingresos y retenciones sin que el motivo del rechazo indique inconsistencias en esos rubros o que soliciten los CFDIs y estados de cuenta bancarios por deducciones incluso en casos sin deducciones personales, alimentan la percepción de una actitud obstructiva. Esto es especialmente grave para contribuyentes que no trabajaron todo el año y cuyo saldo a favor proviene únicamente de retenciones excesivas, ya que no deberían enfrentar cuestionamientos sobre deducciones inexistentes. Esta práctica podría interpretarse como una violación al principio de buena fe que debe regir las actuaciones de las autoridades fiscales, conforme al artículo 8 del CFF.

 

  1. Impacto en contribuyentes sin eFirma: La falta de eFirma es un obstáculo significativo, ya que el Formato Electrónico de Devoluciones (FED) requiere eFirma para su presentación en línea. Aunque el SAT permite solicitudes manuales sin eFirma para saldos menores a $10,000 (con cita en una oficina del SAT), este proceso es engorroso y desincentiva a muchos contribuyentes, especialmente a aquellos con poca experiencia fiscal o recursos limitados.

 

  1. Declaración complementaria como estrategia inicial: Presentar una declaración complementaria antes de optar por una solicitud manual es razonable, ya que permite corregir posibles errores en la declaración original (como no marcar la opción de "devolución") y volver a someter la solicitud al proceso automático. Sin embargo, dado el alto índice de rechazos reportado en 2024, no hay garantía de que una complementaria resuelva el problema, especialmente si los rechazos están motivados por criterios internos del SAT más que por errores del contribuyente.

 

Recomendaciones para obtener el reembolso

Para los contribuyentes que enfrentan el rechazo de su devolución automática, especialmente aquellos sin eFirma, propongo las siguientes acciones, ordenadas por prioridad y practicidad:

1. Revisar el motivo del rechazo en el Buzón Tributario

  • Acción: Ingresa al portal del SAT (sat.gob.mx) con tu RFC y contraseña, y revisa el estado de tu devolución para identificar el motivo específico del rechazo. Si no tienes Buzón Tributario activo, actívalo de inmediato, ya que es la vía oficial de comunicación con el SAT.
  • Importancia: Los motivos parecen ser recurrentes (e.g., "inconsistencias en deducciones"), sin embargo es recomendable conocer las causales para descartar errores en la CLABE o algún otro dato erróneo en la captura.
  • Para quienes no tienen eFirma: Este paso no requiere eFirma, solo RFC y contraseña, por lo que es accesible para todos.

 

2. Presentar una declaración complementaria

  • Acción: Si el rechazo se debe a un error corregible (e.g., no marcar la opción "devolución", datos mal capturados, o deducciones cuestionadas), presenta una declaración complementaria antes del 31 de julio de 2025, que es el plazo para que las devoluciones automáticas sean procesadas. Asegúrate de:
    • Verificar que la CLABE bancaria esté activa, a tu nombre, y vinculada a tu RFC.
    • Confirmar que los datos de ingresos, retenciones, y deducciones coincidan con los CFDI disponibles en el portal del SAT.
    • Marcar explícitamente la opción "devolución" en el aplicativo.
  • Ventajas: Es un trámite sencillo que se puede realizar con contraseña (si el saldo es menor a $150,000 y usas una CLABE precargada) y no requiere eFirma. Además, permite volver a intentar la devolución automática sin pasar por el proceso manual.
  • Limitaciones: Si el SAT persiste en rechazar la devolución por motivos poco claros, este paso podría no ser suficiente. En ese caso, considera los pasos siguientes.

 

3. Solicitud manual de devolución (con o sin eFirma)

  • Para contribuyentes con eFirma:
    • Acción: Ingresa al portal del SAT, accede a la sección "Trámites > Devoluciones y Compensaciones > Solicitud de devolución", y presenta el Formato Electrónico de Devoluciones (FED). Adjunta:
      • CFDI de las deducciones personales (si aplicaste alguna).
      • Estados de cuenta bancarios que muestren los pagos de dichas deducciones.
      • Papel de trabajo con el detalle de ingresos y retenciones (puedes usar los CFDI de nómina disponibles en el Visor de Nómina del SAT).
      • Estado de cuenta con CLABE activa, no mayor a 2 meses de antigüedad, que incluya tu RFC.
    • Consejo: Asegúrate de que todos los documentos estén digitalizados en formato .zip. Revisa que no haya inconsistencias entre los CFDI y los datos declarados, ya que cualquier discrepancia puede generar un nuevo rechazo.

 

  • Para contribuyentes sin eFirma (saldos ≤ $10,000):
    • Acción: Agenda una cita en una Administración Desconcentrada de Servicios al Contribuyente (ADSC) a través del portal del SAT o MarcaSAT (55 627 22 728). Presenta la solicitud de devolución en persona con los mismos documentos mencionados, digitalizados en un dispositivo magnético (USB o CD). No es necesario contar con eFirma para este trámite si el saldo es menor o igual a $10,000 y no estás obligado a inscribirte en el RFC o a usar eFirma.
    • Consejo: Lleva una identificación oficial y verifica que tu Buzón Tributario esté activo para recibir notificaciones. Si el saldo es mayor a $10,000, considera tramitar la eFirma (ver paso 4).
  • Tiempo de resolución: El SAT tiene 40 días hábiles para resolver la solicitud manual, aunque revisiones adicionales pueden extender este plazo.

 

4. Obtener la eFirma (si es necesario)

  • Acción: Si el saldo a favor supera los $10,000 o si prefieres realizar trámites en línea para evitar citas presenciales, tramita la eFirma:
    • Ingresa al portal del SAT y utiliza SAT ID para renovar o generar la eFirma si está vencida o no la tienes.
    • Alternativamente, agenda una cita presencial en una oficina del SAT para tramitarla. Necesitarás una identificación oficial, CURP, y un correo electrónico activo.
  • Importancia: La eFirma agiliza los trámites en línea y es obligatoria para el FED si el saldo supera los $10,000 o si no usas una CLABE precargada. Aunque implica un esfuerzo adicional, es una herramienta útil para futuros ejercicios fiscales.
  • Nota: Si el contribuyente no está obligado a usar eFirma (e.g., solo tiene ingresos por sueldos y salarios y el saldo es ≤ $10,000), puede evitar este paso y optar por la solicitud manual en persona.

 

5. Buscar asesoría o apoyo institucional

  • Acción: Si el SAT persiste en rechazar la devolución o los motivos no son claros, busca apoyo de:
    • PRODECON: La Procuraduría de la Defensa del Contribuyente ofrece orientación gratuita, presencial y remota, para contribuyentes con problemas en devoluciones de ISR. Puedes contactarlos a través de su portal (prodecon.gob.mx) o por teléfono (55 1205 9000). PRODECON ha anunciado asistencia específica para casos de rechazos en la Declaración Anual 2024.
    • Contadores o asesores fiscales: Un profesional puede ayudarte a preparar la solicitud manual o a identificar errores en la declaración que no hayas notado.
  • Ventajas: PRODECON puede mediar con el SAT y aclarar si los rechazos son injustificados, mientras que un contador puede optimizar la presentación de documentos para evitar nuevos rechazos.

 

6. Interponer un recurso de inconformidad (si todo lo anterior falla)

  • Acción: Si el SAT niega la devolución manual o no responde en el plazo de 40 días hábiles, presenta un recurso de inconformidad ante el SAT o un juicio de nulidad ante el Tribunal Federal de Justicia Administrativa. Para esto, es recomendable contar con asesoría legal o de PRODECON.
  • Nota: Este paso es más complejo y debe considerarse solo si el monto del saldo a favor justifica el esfuerzo y los costos asociados.

 

Recomendaciones específicas para contribuyentes sin eFirma

  • Prioriza la declaración complementaria: Intenta corregir cualquier error en la declaración original antes del 31 de julio de 2025, ya que no requiere eFirma si usas contraseña y una CLABE precargada.
  • Opta por la solicitud manual en persona: Si la complementaria no funciona y el saldo es ≤ $10,000, agenda una cita en una oficina del SAT para presentar la solicitud sin eFirma. Lleva todos los documentos requeridos para evitar retrasos.
  • Considera tramitar la eFirma: Aunque no estés obligado, obtener la eFirma te dará mayor flexibilidad para trámites futuros y evitará depender de citas presenciales.
  • Busca apoyo de PRODECON: Si enfrentas obstáculos, contacta a PRODECON para orientación gratuita antes de desistir de tu solicitud.

Reflexión final

La situación descrita apunta a una combinación de fallas sistémicas en el proceso automático de devoluciones y una posible estrategia del SAT para retrasar pagos, lo que afecta desproporcionadamente a contribuyentes con menos recursos o conocimientos fiscales, como aquellos sin eFirma. Si bien la presentación de una declaración complementaria es un buen primer paso, los contribuyentes deben estar preparados para escalar al proceso manual y, en casos extremos, buscar apoyo institucional o legal. La clave es mantener la documentación completa, revisar minuciosamente las notificaciones del SAT, y no desistir del derecho a recuperar el saldo a favor, que está protegido por el artículo 22 del CFF.


Respecto del papel de trabajo para integrar los ingresos y retenciones y basado en los requerimientos típicos del SAT para este tipo de trámites, Abajo sugiero un ejemplo del papel de trabajo:

 


domingo, 9 de marzo de 2025

Disfruten lo votado: el arrepiento o las consecuencias

No están arrepentidos. No realmente. Quienes apoyaron con su voto a un régimen que ha desfigurado la constitución y ejecutado un golpe de estado contra uno de los tres poderes de la unión no parecen lamentar su decisión por lo que implicó desde el inicio. No. Su arrepentimiento, si acaso existe, no es por haber respaldado un proyecto que sabían autoritario, sino porque ahora las consecuencias de ese voto les han alcanzado a ellos mismos.

“No se podía saber”, dicen algunos. “No votamos por esto. No dimos un cheque en blanco. No es culpa de nadie”. Excusas que suenan huecas cuando se confrontan con la realidad. Porque, en el fondo, no se arrepienten de su voto; se arrepienten de que el costo de sus decisiones ya no recaiga solo en los demás, sino que ahora les toque a ellos sufrirlo. Sabían —sin lugar a dudas— que su elección afectaría negativamente a otros. Justificaron que derechos elementales fueran pisoteados en nombre de un supuesto bien mayor. Lo admitieron cuando mandaron al diablo a las instituciones, cuando negaron hechos y evidencias que contradecían su narrativa. Siempre se supo lo que este régimen haría; lo que creyeron fue que las consecuencias las pagarían otros, mientras ellos permanecerían a salvo, intocados.

No les importó que el líder fuera un fratricida, ni que sus acólitos fueran mendaces descarados, incapaces de aceptar una derrota en las urnas. No les preocupó que “mandar al diablo a las instituciones” no fuera solo una bravata, sino una declaración de intenciones respaldada por actos concretos: un intento de impedir una toma de protesta, la violencia contra sesiones del congreso. Todo eso se sabía de antemano. Las señales estaban ahí, claras como el día. Pero ellos asumieron que el precio lo pagarían otros, mientras ellos cosecharían los frutos de su “transformación”.

Se aferraron al mantra de “no mentir, no robar, no traicionar”, ignorando una vida entera de evidencias que contradecían esas palabras. Y, peor aún, lo sostuvieron incluso cuando el ejercicio del poder mostró lo opuesto. ¡Qué locura! Creyeron en un viento de promesas vacías, a pesar de que la incapacidad para gobernar era evidente. “Gobernar ni tiene ciencia” era la consigna, pero los hechos hablan más que las palabras.

Sin embargo, no me malinterpreten. Me alegra ver que ahora expresen su descontento. Hay motivos de sobra para estarlo. Pero creo que les falta algo esencial: autocrítica. Una introspección honesta que los lleve a preguntarse: ¿por qué antes no les parecía inaceptable lo que sí se podía saber que ocurriría? ¿Por qué solo ahora, cuando su vida, sus principios y su estilo de vida están comprometidos, sienten esa terrible sensación de pérdida? Mientras tanto, observan a otros —a quienes las consecuencias aún no alcanzan, pero eventualmente lo harán— permanecer indiferentes o incluso celebrar la destrucción que ya les afecta a ellos.

La cosa es simple: SE LES DIJO. SÍ SE PODÍA SABER. Y SÍ ES SU CULPA. No hay escapatoria a esa verdad. Cada advertencia ignorada, cada evidencia desechada, cada justificación para apoyar lo indefendible los trajo hasta aquí. Ahor toca hacer algo al respecto. Prepararse para corregir el rumbo cuando tengan la oportunidad —si es que la volvemos a tener— de ejercer el voto. Que recuerden que son los resultados, no las supuestas buenas intenciones, lo que marca la diferencia.

Mientras tanto, que enfrenten las consecuencias de sus decisiones. Que lidien con lo que votaron. Porque, al final del día, esto no es un castigo inmerecido ni una sorpresa inesperada. Es, simplemente, lo que eligieron. En pocas palabras, que DISFRUTEN LO VOTADO.

domingo, 23 de febrero de 2025

El “lejano” 2030. (Por PoloCDMX)

El gobierno de Claudia Sheinbaum ha heredado y perpetuado los errores de su mentor, Andrés Manuel López Obrador. A pesar de su incapacidad para desprenderse de su sombra, esto no ha sido una debilidad, sino su mayor fortaleza. Sheinbaum ha construido su legitimidad sobre la base de la continuidad, evitando cualquier atisbo de independencia real. Los resultados están a la vista: una economía estancada, instituciones debilitadas, corrupción rampante y una sociedad profundamente dividida. Sin embargo, sería un error subestimar lo que su administración y su partido han logrado: mantener una narrativa cohesionada, una base de apoyo inquebrantable y una maquinaria electoral implacable. 


Sheinbaum no ha necesitado ser una gran estratega ni demostrar habilidades excepcionales de gobierno. Su mayor fortaleza, al igual que la de AMLO, radica en su capacidad para manipular la percepción pública. Como bien advirtió Friedrich Hayek, “lo que llamamos opinión pública está formado por ideas que la mayoría nunca cuestiona, pero que acepta como incuestionables.” Esta es la esencia de la estrategia de Morena: imponer narrativas que desvíen la atención de su incompetencia y mantener a la ciudadanía discutiendo lo que a ellos les conviene.


Mientras nosotros nos indignamos por cada golpe a las instituciones o por cada nombramiento absurdo, ellos siguen avanzando. No importa si destruyen el sistema de salud, desmantelan la educación pública o cooptan órganos autónomos. Para Morena, lo único relevante es consolidar el poder. Casos como el de Ricardo Anaya, sujeto a una persecución política utilizando a la fiscalía como brazo ejecutor, lo demuestran claramente: no buscan justicia, buscan percepción. Y esa percepción ha sido suficiente para aniquilar a cualquier adversario. Además, cada día siguen incorporando a lo peor de todos los partidos, fortaleciendo su red de clientelismo y pragmatismo político sin escrúpulos.


Pero el problema no es solo Morena; el problema somos nosotros. Desde la oposición, seguimos despreciando al gobierno por su ineptitud, pero fallamos en comprender su estrategia política. Nos quedamos atrapados en la indignación pasiva, como si escandalizarnos fuera suficiente para derrotar a una maquinaria electoral perfectamente aceitada. John Stuart Mill lo expresó con claridad: “La peor forma de tiranía no es aquella que se ejerce por medio de las leyes, sino la que se establece en los corazones y las mentes.” Morena ha entendido esto mejor que nadie.


Mientras nosotros debatimos sobre qué tipo de país queremos, o nos escandalizamos por nombramientos absurdos, ellos ya están diseñando cómo controlar el discurso de la próxima década. Hablamos de cómo reconstruir el país, pero ignoramos que, sin liderazgo claro y unidad estratégica, esas discusiones son meramente aspiracionales. 


La oposición sigue atrapada en sus propias divisiones. Nos desgastamos criticando a posibles candidatos: si son carismáticos, si conectan con la gente o si su historial es impecable. En lugar de reconocer que Sheinbaum y su equipo enfrentan a un adversario fragmentado y torpe, seguimos analizando personalidades mientras ellos consolidan su poder. El problema no es solo el liderazgo, sino nuestra incapacidad colectiva para estructurar una visión unificada que haga frente a esta maquinaria.


En el camino, las instituciones siguen cayendo. Cada fideicomiso desaparecido, cada órgano autónomo cooptado, cada política pública desmantelada bajo el pretexto de la “austeridad republicana”, son golpes profundos que costarán décadas reparar. Y, en un acto que marca un antes y un después en la historia del país, la reforma judicial impulsada por AMLO como un capricho personal y un deseo de venganza ha dejado al sistema de justicia en ruinas. Esta reforma, más que una transformación, es un retroceso que debilita el Estado de derecho y abre la puerta a la arbitrariedad.


Todo esto ocurre mientras la corrupción y la impunidad se camuflan bajo un discurso de supuesta transformación y justicia social. El 2030 está a la vuelta de la esquina, y si no reconocemos que estamos enfrentando a una maquinaria perversa y despiadada, diseñada para perpetuarse en el poder, seguiremos condenados a observar desde la barrera. Es hora de abandonar la ingenuidad y entender que no basta con indignarse o escandalizarse. Hay que actuar con madurez, con estrategia y con una narrativa que recupere la confianza de los ciudadanos.


Sheinbaum no es invencible, pero derrotarla exige un cambio radical en la forma en que enfrentamos el escenario político. Como dijo Edmund Burke, “lo único necesario para que el mal triunfe es que los hombres buenos no hagan nada.” Si seguimos atrapados en la indignación superficial, habremos sido cómplices de nuestra propia derrota.


Es momento de ver el bosque, no solo las ramas. La lucha será difícil, pero claudicar no es una opción.

sábado, 22 de febrero de 2025

¿Casualidad o señal? Los gestos que sacuden la política

En política, como dice el refrán mexicano, “no hay coincidencias”. Y cuando tres figuras prominentes —Elon Musk, Steve Bannon y Eduardo Verástegui— levantan el brazo, palma abajo, en eventos cargados de simbolismo, es difícil no ver un patrón. Esto no es un tropiezo inocente; es un eco que resuena con la historia.

El 20 de enero, en la toma de posesión de Trump, Musk exclamó “¡Gracias por hacer esto posible!” y extendió el brazo tras tocarse el pecho. “Un gesto torpe”, dicen algunos; otros, como la historiadora Ruth Ben-Ghiat, lo llamaron “beligerante”. Musk lo desestimó en X como un ataque gastado, pero grupos neonazis lo aplaudieron. ¿Casualidad?

Luego, en CPAC el 20 de febrero, Bannon cerró su discurso —“¡Luchen, luchen, luchen!”— con un saludo de brazo recto. Un estratega como él no improvisa símbolos así en un escenario conservador tan serio. Al día siguiente, Verástegui, el activista mexicano, repitió el gesto: mano al pecho, brazo alzado, “Mi corazón está con ustedes”. ¿Otra casualidad en 24 horas? El líder francés de extrema derecha, Jordan Bardella, abandonó su discurso en protesta, oliendo una referencia al nazismo.

Tres gestos, tres figuras del círculo de Trump, en un mes. El saludo nazi no era solo un ademán; era un juramento, un unificador de un régimen que dejó millones de muertos. Hoy, en un clima post-6 de enero, con Musk apoyando a la AfD alemana y Bannon predicando “America First”, estas imágenes no pasan desapercibidas. ¿Provocación? ¿Señal a sus bases? ¿O solo estética de poder? La historia nos enseña que los símbolos importan, y en política, repetirlos no es accidente.

No digo que sean malvados como los nazis —eso requiere más que un saludo, más que declaraciones—, pero tampoco compro que sean errores. Son demasiado calculados, y CPAC no es un circo. Es un mensaje, y nos toca decidir qué significa y cómo enfrentar la muy real amenaza que representa.

viernes, 10 de enero de 2025

¿Justicia o Abuso? La Controversia de las Lonas de PROFECO en Gasolineras.

La reciente campaña de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) titulada “No cargues aquí, se vuelan la barda con los precios” ha generado un intenso debate en México. La colocación de lonas en gasolineras que venden combustible a "precios excesivos" ha sido vista por algunos como una medida necesaria para proteger a los consumidores, mientras que otros la consideran una acción arbitraria y potencialmente ilegal. En este artículo, exploraremos los diferentes aspectos de esta controversia y sugeriremos cursos de acción para los afectados.

La Justificación de PROFECO

PROFECO, como entidad encargada de proteger los derechos de los consumidores, tiene la responsabilidad de asegurar que los precios de los productos y servicios sean justos y equitativos. La colocación de lonas en gasolineras que no respetan los precios sugeridos es una medida que busca advertir a los consumidores sobre posibles abusos y fomentar la competencia justa. Según la Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC), PROFECO tiene la facultad de aplicar medidas precautorias y sanciones para proteger la economía de los consumidores.

Sin embargo, la colocación de lonas no está explícitamente detallada en la LFPC como una sanción específica. Esto ha llevado a cuestionamientos sobre la legalidad de esta medida y si se están respetando los derechos de los propietarios de las gasolineras.

La Controversia Legal

Mi principal crítica a la campaña de PROFECO radica en la falta de claridad legal sobre la colocación de lonas. La Ley Federal de Procedimiento Administrativo establece que cualquier sanción debe estar claramente especificada en la ley y seguir un procedimiento adecuado que garantice el derecho de audiencia y defensa. La colocación de lonas no solo no se encuentra listada como una de las sanciones establecidas en la LFPC sino que además se realiza sin una orden o notificación previa lo que podría considerarse una violación de estos derechos.

Además, esta medida podría ser inconstitucional si se aplica de manera discrecional y sin un fundamento legal claro, recordemos que esta campaña surge a raíz de las declaraciones de Sheinbaum en una conferencia matutina respecto de lo que a su juicio debe ser el preco "justo" de la gasolina (entre 23 y 24 pesos segón ella). La falta de transparencia en el proceso de selección de las gasolineras afectadas también ha generado preocupación entre los propietarios y el público en general.

Impacto en los Consumidores y Propietarios

Para los consumidores, la campaña de PROFECO puede parecer una medida positiva que busca proteger sus intereses. Sin embargo, la falta de claridad legal y la posible arbitrariedad en la aplicación de las lonas pueden generar desconfianza en las instituciones y en la efectividad de las medidas de protección al consumidor.

Por otro lado, los propietarios de gasolineras se enfrentan a un dilema. La colocación de lonas puede afectar negativamente su reputación y sus ingresos, incluso si están cumpliendo con las regulaciones. La falta de un proceso claro y justo para impugnar estas medidas también es una preocupación importante.

Cursos de Acción para los Afectados

Para los propietarios de gasolineras que se sientan afectados por la colocación de lonas, es crucial seguir algunos pasos para proteger sus derechos:

  1. Documentación y Evidencia: Mantener un registro detallado de los precios y las prácticas comerciales puede ser útil para demostrar el cumplimiento con las regulaciones. Esto incluye guardar recibos, facturas y cualquier comunicación con PROFECO.

  2. Asesoría Legal: Consultar con un abogado especializado en derecho administrativo y protección al consumidor puede proporcionar una mejor comprensión de los derechos y opciones legales disponibles. Un abogado puede ayudar a impugnar la colocación de lonas si se considera que se ha aplicado de manera injusta o ilegal.

  3. Comunicación con PROFECO: Establecer un diálogo abierto y transparente con PROFECO puede ayudar a resolver disputas de manera amistosa. Presentar pruebas y argumentos sólidos puede persuadir a la autoridad de reconsiderar la medida.

  4. Recursos Legales: Si la comunicación directa no resuelve el problema, los propietarios pueden considerar presentar un recurso de revisión o una demanda ante los tribunales administrativos. Esto puede ser un proceso largo y costoso, pero puede ser necesario para proteger los derechos y la reputación del negocio.