martes, 25 de junio de 2024

Inmunidad patriótica

En la actualidad, nos encontramos en una situación política en la que todo aquello que antes era criticado, ahora se justifica. El financiamiento ilegal de campañas, el uso del aparato del estado para perseguir a los opositores, la intervención en procesos electorales, la impunidad, el influyentismo, la corrupción, la opacidad, el gasto discrecional, y el incremento de la violencia y los asesinatos a raíz de una militarización desenfrenada, son ahora parte de la norma.

La seguridad con la que mienten, "con sinceridad" como diría Violeta Vázquez, les otorga una ventaja considerable sobre aquellos que vacilan al decir la verdad. Ya sea por timidez, por mantener las apariencias o por no querer molestar al poder, muchos optan por el silencio.

Las acrobacias retóricas, las contradicciones y las demostraciones de estupidez supina serían cómicas si no fueran tan peligrosas. Pero cuando los idiotas tienen poder, se vuelven una amenaza, especialmente para aquellos que votan con fe ciega y carecen de los medios o la voluntad para defenderse cuando se ven afectados.

Estos últimos no son tontos, son ignorantes. Ignorantes de que una democracia es mucho más que un gobierno de la mayoría. Es también defender los derechos de las minorías, los del individuo y limitar el poder. Esto no es una concesión graciosa del hombre fuerte, sino el resultado de años, décadas, siglos de construcción de un sistema de contrapesos. La destrucción de lo que se ha construido con tanto esfuerzo no es un avance, sino un retroceso monumental.

El régimen de López Obrador se ha otorgado algo similar a una inmunidad patriótica. Es imposible olvidar el fraude patriótico de 1986, cuando el régimen de entonces, del cual López era parte, implementó una serie de artimañas antes, durante y después de los comicios, violando abiertamente la legislación electoral, con la justificación de impedir que “la reacción” llegara al poder. Hoy, han repetido la dosis.

No espero nada bueno del sexenio que está por iniciar. El sexenio de López comenzó con finanzas sanas, fideicomisos sólidos e instituciones funcionales. Esto le presentó un obstáculo en su afán destructor, pero insistió hasta minar a estas instituciones. 

La sumisión de Arturo Zaldívar, la destrucción de la CNDH, de la CRE, el debilitamiento del INAI presagiaban un desastre. Pero entonces, las elecciones intermedias le arrebataron la mayoría calificada en el congreso. Eso ya no es así. La elección presidencial le ha abierto la puerta a un grupo de obtusos a los que solo se les resistía ese congreso mayoritario, pero sin mayoría calificada, y la SCJN. Ahora tienen el congreso y con él, la posibilidad y el deseo de destruir a la corte.

Para colmo, los fideicomisos que fueron expoliados y que dieron margen de maniobra económica a un gobierno irresponsable en las finanzas públicas, ya no existen. Se avecinan seis años aún peores que los que están por concluir. Es un panorama desolador.

Un amigo muy optimista me dijo que es importante recordar que la democracia es resistencia, y la resistencia es esperanza, pero yo no soy optimista y aunque la historia demuestra que las democracias resurgen eventualmente, creo que México aun va a desender más en la espiran autoritaria antes de empezar a mejorar.

martes, 21 de mayo de 2024

La Estrategia de Seguridad

El gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha sido objeto de críticas significativas en relación con su estrategia de seguridad. A pesar de su promesa de disminuir los índices de violencia e inseguridad mediante una estrategia conocida como “Abrazos, no balazos”, los datos muestran un panorama preocupante.

 

Durante su gobierno, se han registrado más de 30 masacres, y estados como Veracruz, Michoacán, Guerrero, Morelos, Sonora, Chihuahua, Oaxaca, Tamaulipas, Jalisco, Guanajuato y Zacatecas han sido escenarios de terribles masacres. Además, se ha registrado un aumento en el número de muertos. Según los datos más recientes, se han registrado durante esta administración, 187,695 homicidios dolosos superando las cifras de los gobiernos anteriores.

 

La estrategia de seguridad de AMLO se basa en ocho ejes, entre ellos destaca la creación de la Guardia Nacional. Sin embargo, a pesar de estas medidas, la violencia y la inseguridad persisten. Esto plantea preguntas sobre la eficacia de la estrategia de seguridad y si realmente está abordando las causas subyacentes de la violencia en México.

 

Además, ha habido críticas sobre el enfoque del gobierno hacia la responsabilidad política. Aunque los simpatizantes de AMLO a menudo insisten en que las críticas y demandas por mejores resultados son un "uso político" de los problemas de seguridad, al mismo tiempo, no dejan de mencionar lo ocurrido en sexenios anteriores. Este doble estándar puede es una forma de intentar evadir la responsabilidad por los problemas actuales.

 

Los datos sugieren que las medidas han sido insuficientes cuando no contraproducentes para abordar la violencia y la inseguridad en México. Lejos de reconocer estos hechos y desafíos de manera que se tomen medidas adicionales para abordar las causas subyacentes de la violencia, Sheinbaum no ve falla alguna y solo promete continuar con lo mismo. Al mismo tiempo, es importante que como ciudadanos reconozcamos que el gobierno y sus simpatizantes no tienen aquí un enfoque equilibrado y responsable hacia la crítica y la rendición de cuentas.

 

De pilón: Si guardáramos un minuto de silencio por cada persona asesinada en lo que va del sexenio, estaríamos en silencio durante 130 días, 8 horas y 15 minutos… Sin embargo, como no sea para hablar solo del pasado, los simpatizantes de AMLO han guardado silencio total sobre los asesinatos del sexenio.

martes, 23 de abril de 2024

La piel delgada de los analistas

La Mesa de Latinus recientemente ha generado reacciones en el contexto del primer debate presidencial, pues resulta interesante cómo los participantes de la mesa, a pesar de su valentía al enfrentar al poder político, han demostrado (algunos de ellos) una sensibilidad inesperada ante las críticas ciudadanas.

Dos semanas después del debate, los participantes aún parecen sentirse lastimados por las opiniones críticas de algunos ciudadanos. Es paradójico que aquellos que han alzado la voz y se han atrevido a cuestionar al sistema político ahora estén lamiéndose las heridas por las críticas que han enfrentado. Esto nos lleva a reflexionar sobre la fragilidad de algunos líderes ante la opinión pública y cómo, a pesar de su coraje inicial, pueden verse afectados por la crítica.


En otros temas de la mesa de hoy, Denise Dresser ha señalado que estamos ante la posibilidad un gobierno encabezado por Sheinbaum, tendria tintes autoritarios, que no dejaría espacio para la crítica y la diversidad de opiniones. Denise Dresser ha asegurado que todas las señales hacen evidente que Claudia gobernaría desde el autoritarismo en caso de ganar. Resulta sorprendente que no haya visto lo mismo en López Obrador. El presidente dió muestras durante años de que haría exactamente lo que finalmente hizo en su sexenio. Dresser ha experimentado en carne propia la reacción del presidente ante sus críticas. El presidente la ha mencionado en varias ocasiones y la ha difamado desde sus mañaneras. Aunque no la ha silenciado directamente, ha intentado intimidarla y cuestionar su reputación. Esta falta de percepción crítica hacia AMLO es un tema relevante que merece ser analizado en profundidad.

En resumen, la Mesa de Latinus y las opiniones de Denise Dresser nos invitan a reflexionar sobre la fragilidad de los líderes de opinión (incluidos los analistas) ante la crítica y la importancia de mantener una mirada objetiva hacia todos los actores del poder.

miércoles, 17 de abril de 2024

México en la Encrucijada: Continuidad o Cambio

La sucesión presidencial en México se encuentra en un punto crítico. El gobierno de López Obrador ha causado un retroceso significativo en los logros que se habían dado hacia el inicio de este siglo. La promesa de continuidad de Claudia Sheinbaum no es más que una extensión de estos retrocesos.

En materia de seguridad, los asesinatos dolosos han aumentado de manera alarmante bajo la administración de López Obrador. La creciente ola de violencia ha dejado a muchas familias en luto y a comunidades enteras en estado de miedo e incertidumbre.

La pobreza también ha crecido de manera significativa. A pesar de las promesas de mejorar la economía y el bienestar de los mexicanos, la realidad es que cada vez más personas se encuentran en situación de pobreza.

El manejo de la pandemia por parte del gobierno ha sido otro punto de fracaso. La falta de una estrategia clara y efectiva resultó en un alto número de contagios y muertes, mientras que a su hijo se le dio trato preferente.

Y que decir de los escándalos de corrupción con involucramiento de sus leales e incluso su familia (hermanos, primos, sobrinos e hijos).

El desabasto de medicamentos es otro problema grave. Muchos mexicanos han tenido dificultades para acceder a los medicamentos que necesitan, lo cual ha tenido un impacto negativo en su salud y calidad de vida y cuando exijieron respuestas, fueron acusados de golpistas.

La amenaza latente a la democracia liberal, a la división de poderes y a la integridad de la Suprema Corte, propuestas por AMLO y hechas propias por Claudia, son preocupaciones que no podemos ignorar. Estos elementos son fundamentales para el funcionamiento de cualquier democracia y su erosión podría tener consecuencias devastadoras.

No estamos en una posición mejor que en el pasado reciente, que tantas veces se criticó con razón. De hecho, estamos empeorando y si no hacemos algo al respecto parece que seguiremos en esa dirección. El argumento erróneo de que no podemos estar peor no se sostiene. Si consideramos los hechos, la continuidad que Claudia ofrece, garantiza que se agravará la situación.

Dado ello, votar por Xóchilt Gálvez es la opción lógica para tratar de evitar el desastre que se prevé se pueda profundizar. No se trata de decantarse por promesas exageradas de progreso y prosperidad, sino de la posibilidad de detener la destrucción de este sexenio para volver al camino de avance democrático del que nos desviamos hace 6 años.

martes, 16 de abril de 2024

Autoritarismo: Una Realidad Indiscutible

El artículo Suspensión de la crítica, de Jesús Silva-Herzog Márquez, aborda la tensión entre la crítica y la polarización política en tiempos de crisis democrática.

El autoritarismo es un fenómeno que ha permeado la historia de la humanidad en diversas formas y contextos. Sin embargo, su esencia permanece inmutable: es un sistema que se impone sin consideración por la diversidad de pensamiento o la libertad individual. La idea de un “autoritarismo light” (@_gabonavarro dixit) es una contradicción en sí misma, ya que el autoritarismo, por definición, es absoluto y excluyente.

El autoritarismo no admite matices ni versiones suavizadas. Parafraseando nuevamente a @_gavonavarro, no viene libre de gluten ni en colores neutros o pastel. No hay autoritarismo light ni ecológico. No lo puedes pedir deslactosado y endulzado con miel de agave. No conoce incisos ni apartados. Es autoritarismo y punto.

La intransigencia del autoritarismo es una realidad que no podemos ignorar. Es un sistema que se impone sin consideración por la diversidad de pensamiento o la libertad individual. La idea de un “autoritarismo light” es una contradicción en sí misma, ya que el autoritarismo, por definición, es absoluto y excluyente.

En este sentido, es fundamental que reconozcamos el autoritarismo en todas sus formas y manifestaciones. No podemos permitirnos el lujo de minimizar su impacto o de ignorar sus consecuencias. El autoritarismo, en cualquiera de sus formas, es una amenaza para la democracia y la libertad individual.

Por otro lado, es importante destacar que el autoritarismo no es una solución a los problemas de nuestra sociedad. Al contrario, es una forma de gobierno que limita la capacidad de las personas para tomar decisiones y ejercer su libertad. El autoritarismo, en última instancia, es una forma de opresión.

Por lo tanto, es esencial que luchemos contra el autoritarismo en todas sus formas. Debemos promover la democracia y la libertad individual como los pilares fundamentales de nuestra sociedad. Como sugiere @TheOCGlobal, debemos educar a las nuevas generaciones sobre los peligros del autoritarismo y la importancia de la democracia.

En conclusión, el autoritarismo es una realidad que no podemos ignorar. Debemos reconocerlo, entenderlo y luchar contra él. Solo así podremos construir una sociedad más justa, libre y democrática.

jueves, 11 de abril de 2024

El Gobierno de López Obrador y la Candidatura de Claudia Sheinbaum: Opacidad, Corrupción y Falsas Equivalencias en la elección

En los últimos años, México ha sido testigo de un gobierno que prometió cambios significativos, pero que ha dejado mucho que desear. El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y su candidata a sucederlo, Claudia Sheinbaum, han estado en el centro de la atención pública. Sin embargo, sus políticas y acciones han generado controversia y preocupación. En este artículo de opinión, exploraremos los fracasos de ambos líderes y cómo la opacidad y la corrupción han afectado la democracia mexicana.

El Costo en Vidas:
López Obrador ha enfocado gran parte de su mandato en temas de seguridad y salud. Sin embargo, los resultados han sido desalentadores. Las políticas implementadas no han logrado reducir la violencia ni mejorar la atención médica. El costo en vidas humanas es innegable. Cada día, familias mexicanas enfrentan la pérdida de seres queridos debido a la inseguridad y la falta de acceso a servicios de salud adecuados.

Obras Faraónicas y Drenaje al Erario:
Las obras faraónicas, como el aeropuerto de Santa Lucía y el Tren Maya, han sido una constante en el gobierno de López Obrador. A pesar de las promesas de beneficios económicos, estas megaestructuras no solo no generan ganancias, sino que continúan drenando recursos del erario público. Es hora de cuestionar la viabilidad y la verdadera intención detrás de estas inversiones millonarias.

Claudia Sheinbaum y los Desastres:
La candidata Sheinbaum no está exenta de críticas. El colapso de la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México y la tragedia en el Colegio Enrique Rébsamen son ejemplos de su gestión. La falta de mantenimiento y la negligencia han costado vidas. Además, el desempeño de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México durante su mandato ha sido cuestionable.

Opacidad y Corrupción:
Tanto López Obrador como Sheinbaum han enfrentado acusaciones de opacidad y corrupción. La falta de transparencia en la toma de decisiones y la asignación de recursos es alarmante. Los ciudadanos merecen saber cómo se manejan sus impuestos y cómo se toman las decisiones que afectan sus vidas.

Falsas Equivalencias:
Resulta incongruente responsabilizar exclusivamente a la oposición de los problemas actuales. Xóchitl Gálvez, por ejemplo, ha sido criticada por errores insignificantes en comparación con los desastres ocurridos bajo el liderazgo de López Obrador y Sheinbaum. Los analistas políticos y los ciudadanos deben dejar de buscar falsas equivalencias y enfrentar la realidad.

Conclusión:
La democracia liberal en México está en peligro. La complacencia y la complicidad solo contribuyen al deterioro continuo. No podemos permitir que la opacidad y la corrupción sigan socavando nuestra sociedad. Es hora de exigir responsabilidad y transparencia. Si no actuamos ahora, podríamos encontrarnos en una situación similar a la de Venezuela, donde la democracia fue destruida gradualmente. No seamos farsantes; seamos ciudadanos informados y comprometidos con un futuro mejor.

De pilón:
El ignorante tiene excusa, el perverso un motivo... Los demás estamos arriesgando la posibilidad de vivir en un estado de derecho.

martes, 12 de marzo de 2024

La Mitología del Obradorismo: Un Análisis de sus Creencias Fundamentales

 

La mitología del Obradorismo tiene como piedra angular la afirmación de un supuesto fraude en 2006. Sin embargo, es importante recordar que no hubo fraude. Así se calificó la elección y se declaró válida. Esto fue determinado por el IFE y el TRIFE, tras el desahogo de alegatos por parte del candidato derrotado, y con una diferencia de 0.56% de votos favorable a Felipe Calderón.

Acerca de esta afirmación ya se ha dicho mucho y se ha desmantelado. Solo se puede aceptar como un acto de fe por parte de los acólitos, serviles y/o ignorantes.

Otra parte de la mitología obradorista, es la que afirma que solo son buenos mexicanos aquellos que son leales a López; no a la constitución, no a los principios fundamentales de la democracia liberal; ni siquiera a los dichos, diagnósticos, promesas y compromisos de López… sino leales a Andrés Manuel y solo a él.

El culto a la persona de López es tal, que discrepar de él es suficiente para ser tildado de traidor a la patria; señalar sus mentiras es motivo de acusaciones de sicariato para los periodistas, y demandar derechos como el de la salud y acceso a medicamentos es calificado de golpismo. El punto de partida de estos ataques es la conferencia de López, la cual realiza con la investidura, recursos y símbolos de uno de los tres Poderes de la Unión, de la titularidad del ejecutivo federal en un régimen presidencialista como el nuestro.

Nada que venga de quien no es adicto a López pasa el filtro de mexicanidad entre los leales.

¿Qué cosa es esa que hace más mexicano y no un traidor a la patria, a quien se anula a sí mismo, sus opiniones propias e incluso niega la realidad con tal de adular, justificar o cuando menos callar lo que de criticable pueda tener López y su gobierno?

Es, pues, un acto de fe igual que la mentira del fraude de 2006. Es así porque López lo dice y si la realidad hace evidente lo contrario, él tiene otros datos y sus leales solo tienen los que él les dice que tengan.

¿La Constitución? Al diablo con la Constitución y las leyes e instituciones que de ella emanen… No me vengan con que la ley es la ley.

Hasta 2018, toda crítica de López a quienes detentaban el poder tras haberlo derrotado electoralmente, se centraba (como debe ser) en señalar violaciones (reales a veces, pero casi siempre inventadas) a la legalidad.

Es solo ahora que detenta el poder, que no hay que reclamarle lo mismo que él reclamó, que hablar de legalidad y estado de derecho, es lo que hace un mal mexicano, un vendepatria, un traidor a la patria. Al diablo su Constitución. El Estado soy yo.

Esa actitud es propia de monarquías absolutistas, anteriores a la Carta Magna de 1215.

Solo quiero decirle a los leales de López que pese a todo lo anterior siguen creyendo que son más mexicanos por esa lealtad que los que en observancia de la ley y ejercicio de sus derechos ciudadanos son críticos o abiertamente opuestos al obradorismo, a transgredir la ley y la constitución, a amedrentar periodistas, a usar el poder del Estado para revelar información personal… A esos quiero decirles que son más obradoristas que yo, pero no más o mejores mexicanos que yo, no son más o mejores demócratas que yo, no son más o mejores ciudadanos que yo… Y no estoy solo, hay muchos más por allí.